Acuerdos de suspensión de hostilidades que tuvieron lugar durante las dos guerras mundiales en un claro del bosque de la ciudad francesa de Compiègne, no lejos de la estación ferroviaria de Rethondes. El 8 de noviembre de 1918 el mariscal Foch, comandante en jefe de las fuerzas aliadas, recibió en un vagón de ferrocarril a los plenipotenciarios autorizados por el Gobierno de Berlín para discutir las condiciones del armisticio. La delegación aliada, presidida por el mariscal Foch, se sentó frente a los miembros de la delegación alemana, que estaba presidida por un político, Mathias Erzberger, a quien deliberadamente el mariscal Hindenburg había designado en el último momento para evitar al Alto Estado Mayor alemán la vergüenza de la derrota y la responsabilidad del armisticio. El general Weygand dio lectura a las condiciones y se fijó un plazo de tres días para el examen de las mismas. A última hora del 10 de noviembre se recibió un mensaje radiofónico alemán...